lunes, 17 de septiembre de 2012

NUKAK MAKÚ, ENFERMOS Y OLVIDADOS.


Si nos remontamos a comienzos de la década de los años 50 muchos sabían de la existencia de un grupo de indígenas, los Nukak Makú, pero  en ese entonces no se le prestó atención a este hecho, fue sólo hasta hace  20  años que en el municipio de Calamar, Guaviare, aparecieron los Nukak y fueron reconocidos ante los ojos del mundo y la historia como la última tribu nómada del continente.

En ese entonces, luego del gran hallazgo de los Nukak Makú, después de la novedad  y del revuelo que esto generó, no sólo en Colombia sino en el mundo entero, al Estado, a sus distintas entidades y administraciones se les olvidó que tenían que plantear y ejecutar una serie de estrategias y acciones para protegerlos y salvaguardarlos;  fue entonces cuando los abandonaron a su suerte. Ni hoy ni hace 20 años se les han proporcionado las condiciones adecuadas de atención a esta comunidad indígena; tampoco garantías de seguridad para que les fuera posible permanecer en su territorio y mucho menos para que salvaguarden su cultura.

Los Nukak Makú son una comunidad que se ha visto afectada por el conflicto armado de nuestro país, el desplazamiento forzado los ha obligado a dejar atrás su territorio, conocido como Laguna Makú. A lo largo de estos desplazamientos se han visto expuestos a diversas enfermedades debido al contacto con otros grupos Nukak, lo que ha ocasionado una  mortalidad importante de adultos, sobre todo adultos mayores. Esto desencadenó en la pérdida de gran parte de sus costumbres y tradiciones; se estima que un 40 o 50% de población Nukak murió en ese lapso de tiempo 1992 y 1996; 1300 o 1400 personas, aproximadamente, murieron. Para los Nukak perder uno de sus integrantes es muy grave; cuando un Nukak muere, muere una posibilidad de supervivencia y de prolongarse en el tiempo como tribu.

A pesar de lo anterior no se generó una conciencia nacional al respecto; nunca consideraron el drama de los Nukak como su propio drama; el gobierno parecía, y aún hoy parece, no  inquietarse frente a esta realidad; actualmente hay menos de 500 Nukak. Aún su situación sigue siendo crítica y las instituciones continúan  haciéndose los de la vista gorda frente a la situación real por la que atraviesan los Nukak en un territorio que no les pertenece, al cual han tenido que acomodarse quieran o no, Ahora vive de modo sedentario en una pequeña finca ubicada a unos 10 kilómetros de la cabecera municipal de San José del Guaviare, por culpa de la guerra que azota  al departamento, en la que participan las FARC, el Ejército y paramilitares. Esto devela la ausencia indiscutible del Estado dentro de la problemática de los Nukak Makú, no hay acompañamiento humanitario, no hay educación,  y que se ve reflejada en la deficiencia de atención en cuanto la salud.

Sin duda, desde el punto de vista social, la enfermedad más grave que aqueja  a los Nukak Makú, es el olvido y abandono general del Estado, desde el punto de vista médico son enfermedades prevenibles que no son atendidas a tiempo por falta de condiciones y responsabilidad social del gobierno.

Las enfermedades que más aquejan a los Nukak son aquellas relacionadas con infecciones respiratorias e infecciones gastrointestinales; desnutrición, paludismo y dengue. Este panorama  se presenta gracias a la falta de agua potable, a la ingesta de alimentos inadecuados, vías de acceso precarias y escasa cobertura del Sistema General de Seguridad Social en Salud. Lo anterior obliga a las familias a acudir a los centros de salud, solo cuando se trata de asuntos de vida o muerte y frente a esto  la Secretaría departamental de Salud parece no tomar cartas en el asunto.

Para los Nukak cualquier enfermedad puede ser catastrófica, una gripa fácilmente se puede convertir en una neumonía que los puede poner el peligro de muerte, como ha sucedido y sucede aún. Puede resultar fatal para ellos caminar tres o cuatro días hasta un centro de salud en donde no existen las condiciones ni recursos necesarios de atención.  Frente a esto las empresas prestadoras de salud, EPS, a las que fueron afiliados no tienen la capacidad económica, ni administrativa para asumir los costos necesarios para la atención de estas comunidades.
Es claro que uno de los principales factores que ha llevado a los Nukak al desplazamiento, desde hace tiempo, ha sido la violencia propia del conflicto armado; la militarización y el conflicto en su territorio. El hecho que no haya servicios de salud es, también, un factor de desplazamiento; los Nukak se ven avocados a desplazarse a zonas donde consigan asistencia médica que sea de fácil acceso y, pues, el único sitio es San José, el resto de municipios están muy abandonados en temas de salud.

Con respecto a la salud, se debe asumir una postura incluyente, planteando y ejecutando estrategias específicas de atención que busquen la prestación móvil de servicios de salud, complementados con el fortalecimiento de una red de sitios fijos de prestación de dichos servicios. Además, se deben contemplar y emprender acciones que fortalezcan las nociones y prácticas medicinales propias de los Nukak Makú.

Los programas enfocados en los Nukak deben tener como principio la flexibilidad para adecuarlos a partir de sus particularidades socioculturales. Es fundamental reconocer la importancia del nomadismo en su estilo de vida, de tal forma que la atención en salud no incentive procesos de  sedentarización.
Debemos tener presente que los Nukak Makú son un pueblo patrimonio de la humanidad, no podemos quedarnos de brazos cruzados esperando su irreversible extinción para hacer algo al respecto.

 
 Por: Natalia Prias Castañeda.
Correo: nataliaprias@gmail.com

sábado, 15 de septiembre de 2012

PROMESAS DEL ESTADO AL DEPARTAMENTO DEL GUAVIARE: ¿SE CUMPLIRÁN?





El líder indígena Luis Suárez le entregó al Presidente Juan Manuel Santos el bastón de mando y la corona de la tribu nukak makú, durante el Acuerdo para la Prosperidad que se cumplió este sábado en el municipio de San José del Guaviare.







Hoy, 15 de septiembre de 2012, el gobierno del Presidente Juan Manuel Santos anunció durante el Acuerdo para la Prosperidad número 85, que se cumplió en San José del Guaviare, que por medio de los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (Ocad), se invertirán recursos, provenientes de las regalías, por un monto aproximado a los 6 billones de pesos, en lo que resta del año, los cuales llegarán directamente a las regiones.

"Que sean lo suficientemente ágiles los procedimientos, pero que al mismo tiempo tengan el cuidado suficiente para que esos recursos queden bien invertidos. Un equilibrio entre la agilidad y la calidad de los recursos", señaló el Jefe de Estado.

Además, que se  presentarán proyectos en infraestructura y producción de caucho en el departamento del Guaviare. "En el caso del Guaviare hay un proyecto que está presentando que tiene que ver con unos proyectos de productivos de caucho -eso es bien importante- unos proyectos que tienen que ver con vías, una necesidad sentida, no solamente de aquí del Guaviare sino en todo el país", añadió el Presidente.

Esperamos que estas afirmaciones del Presidente Santos se cumplan, porque esto ayuda al crecimiento de todo el departamento del Guaviare y por ende a los habitantes de este, como lo son los Nukak Makú. Y no que solo se quede en palabras. 





Por: Stephanie Alférez
Correo: s.alferez@hotmail.com
 





Para más información: 



http://www.elheraldo.co/noticias/nacional/a-traves-de-los-ocad-gobierno-invertira-cerca-de-6-billones-en-lo-que-resta-del-an